“En el caso de Sonora, el primer responsable de la seguridad de los sonorenses es el gobierno estatal, como establece claramente la Constitución. La actual administración comenzó durante el 2015 y hoy entrega el estado con casi el 300 por ciento de incremento de homicidio doloso en el sexenio”, informó Jacobo Mendoza Ruíz, presidente estatal de Morena.
Agregó que Sonora es uno de los 10 estados del país que tuvieron un incremento en los homicidios, mientras que las estadísticas mejoraron en 22 entidades. Mientras que la titular del Ejecutivo ha sido señalada por ser una de los cinco mandatarios estatales que más falta a las reuniones de la Mesa de Coordinación Estatal para la Construcción de Paz, con solo 20 asistencias.
La inseguridad, comentó el líder morenista, se trata de un problema heredado por los gobiernos del PRI y del PAN que fomentaron la corrupción y la complicidad entre las fuerzas policiacas y el crimen organizado, como quedó expuesto con la detención de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública en el sexenio de Felipe Calderón.
“El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha logrado revertir la tendencia de crecimiento de homicidios dolosos de los últimos cinco años, resultado de la estrategia fallida de seguridad de Calderón y el pésimo manejo de la administración que comandaba Peña Nieto que convirtieron al país en un cementerio”, añadió.
Mendoza Ruíz comentó que el 2020 fue el primer año con baja en homicidios dolosos de los últimos cinco a nivel federal, demostrando que la estrategia comandada por MORENA en torno a la disminución de homicidios dolosos ha funcionado y la tendencia heredada fue contenida y ta comenzó a ser revertida.
Sonora, dijo, sufrió un crecimiento del 13.4 por ciento durante el último año. Si el gobierno estatal hubiera jalado parejo con el gobierno federal hoy tendríamos resultados como en el resto del país, con bajas sostenidas en 16 de los 18 delitos prioritarios del fuero común, concluyó.
