Un nuevo incendio de rápido avance se desató este miércoles en el condado de Los Ángeles, obligando a la evacuación de miles de personas. Esto ocurre tras días de intensos incendios que han dejado al menos 28 víctimas mortales.
El incendio, conocido como Hughes, inició en el norte de Castaic durante la mañana y, en menos de dos horas, arrasó más de 2 mil hectáreas (5.000 acres), impulsado por fuertes vientos en el sur de California, según informó el Departamento de Bomberos de California (Cal Fire).
El Servicio Nacional de Meteorología (NWS, en inglés) mantiene una alerta de condición climática crítica en el sur de California hasta el jueves sobre el condado de Los Ángeles y el colindante Ventura, con rachas de viento que podrían alcanzar los 80 kilómetro por hora.
Los múltiples incendios que asolan Los Ángeles y que pasarán a la historia de Estados Unidos como uno de los peores desastres naturales se han cobrado la vida de 28 personas, con más de 16 mil 500 hectáreas quemadas, 15 mil estructuras destruidas y la evacuación de más de 150 mil personas.