La portavoz de la Oficina de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Liz Throssell, señaló que los hallazgos dentro del rancho Izaguirre, en Jalisco, recuerdan el “trauma” de las desapariciones forzadas cometidas por los cárteles en el país.
“El reciente descubrimiento en México de restos humanos calcinados y cientos de objetos personales, como zapatos y ropa, en un rancho presuntamente operado por un cártel de drogas, es un recordatorio profundamente perturbador del trauma de las desapariciones vinculadas al crimen organizado en el país”, dijo.
Además, tachó de “perturbador” el descubrimiento de este centro de exterminio, sitio que ya había sido intervenido por la Guardia Nacional y la Fiscalía General del estado en septiembre de 2024, sin que ambas instancias detectaran los restos óseos encontrados por los familiares.
También señaló que el predio era “utilizado por el Cártel Jalisco Nueva Generación para entrenar a jóvenes que eran reclutados forzosamente mediante ofertas falsas de empleo”.
El Tip: El año pasado, el entonces fiscal de Jalisco, Luis Méndez, rechazó la existencia de cualquier tipo de indicio de fosas o crematorios clandestinos del crimen.
“Eran sometidos a tratos brutales y aquellos que mostraban resistencia o no cumplían con los requisitos del cártel eran asesinados, lo que concuerda con la presencia de fragmentos óseos y restos humanos carbonizados en el lugar”, señaló en un comunicado.
Pidió a las autoridades garantizar investigaciones puntuales, imparciales y transparentes para identificar pronto los restos hallados en el rancho.
“Dado el amplio impacto de las desapariciones en México, también instamos al Gobierno a mejorar las medidas preventivas y a garantizar la protección y el apoyo a las familias de víctimas de desapariciones en su búsqueda de verdad, justicia y reparación”, dijo.