Madrid. El mal tiempo y un mar embravecido obligó a dar marcha atrás a las cerca de 30 embarcaciones que zarparon ayer desde Barcelona rumbo a Gaza, en la llamada Global Sumud Flotilla, que tiene como objetivo romper el cerco criminal que asfixia a la población palestina y abrir un canal humanitario.
El plan sigue en curso, sólo que tras este primer contratiempo se reunirán a lo largo del día los organizadores y decidirán cuándo volverse a hacer a la mar, previsiblemente podría ser a lo largo del día.
Las embarcaciones en las que viajaban destacados activistas, como la sueca Greta Thunberg o seis ciudadanos mexicanos, entre ellos Sol González, Arlín Medrano, Dolores Pérez y Karen Castilla, se encontraron a lo largo de la noche con muy mal tiempo, lo que obligó al equipo especializado en la navegación a volver al puerto de Barcelona para evitar correr riesgos innecesarios.
El plan sigue su curso, sólo que ahora se pospondrá algunos días, ya que tienen previsto incorporarse más embarcaciones y activistas en los puertos de Sicilia, Catania, Túnez y Grecia, hasta alcanzar las más de 60 embarcaciones y más de 500 activistas, que proceden de 44 países distintos y de oficios también diversos.
