La Haya. La Corte Internacional de Justicia (CIJ) celebrará audiencias a petición de Sudáfrica sobre las medidas adicionales contra Israel por la situación en la ciudad de Rafah, en el sur de la franja de Gaza.
«El jueves, 16 de mayo, y el viernes, 17 de mayo, la Corte Internacional de Justicia celebrará audiencias públicas en el Palacio de la Paz en la Haya a petición de Sudáfrica, presentado el 10 de mayo 2024, para tomar medidas provisionales adicionales y modificar las medidas previamente prescritas por el tribunal en el caso relativo a la aplicación de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio en la franja de Gaza (el caso de Sudáfrica contra Israel)», destaca la Corte en un comunicado oficial.
Las Fuerzas de Defensa de Israel comenzaron el 7 de mayo una operación militar en la ciudad de Rafah, donde se encuentran cerca de 1.5 millones de palestinos que se vieron obligados a abandonar anteriormente las partes norte y central de la franja de Gaza.
El 10 de mayo, Sudáfrica presentó una solicitud urgente a la CIJ, pidiendo que se tomen medidas adicionales contra Israel por la situación en Rafah, teniendo en cuenta «circunstancias cambiadas y hechos nuevos».
En su demanda, el país africano expresó la preocupación de que el ataque israelí a Rafah y el riesgo que supone para los suministros de ayuda humanitaria a Gaza no solo agravan la situación, sino que también causan daños irreparables a los derechos del pueblo palestino en la Franja de Gaza».
El 26 de enero, la CIJ tomó una decisión provisional sobre la demanda de Sudáfrica contra Israel, al que ordenó que adopte todas las medidas necesarias para impedir el genocidio y proporcione con urgencia asistencia humanitaria al enclave palestino.
La Corte celebró, los días 11 y 12 de enero, audiencias sobre la demanda presentada por Sudáfrica el 29 de diciembre contra Israel, acusado de violar la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio en la Franja de Gaza.
En su discurso, Sudáfrica pidió al tribunal que obligue a Israel a detener la operación militar en el enclave palestino, garantizar el acceso de sus habitantes a alimentos, agua y ayuda humanitaria, y a no impedir el ingreso de las misiones internacionales a Gaza.
Israel participó en el proceso, aunque no reconoce la jurisdicción de la CIJ y hasta ahora ha ignorado sus procedimientos o decisiones.
Según Israel, la demanda sudafricana es una explotación de la Corte y carece de pruebas, mientras Pretoria «colabora con el grupo terrorista que aboga por destruir el Estado de Israel»