En caprichos, Mel B dilapida su fortuna de 38 millones de libras

 

MADRID.

La cantante británica Mel B no podría hacer frente a las demandas económicas de ex marido, Stephen Belafonte, debido a que gran parte de su fortuna fue dilapidada en gastos extravagantes.

Según reveló el pasado viernes en sede judicial su abogada, Jacalyn Davis, la artista de 42 años habría gastado parte de su patrimonio, valorado en 38 millones de libras, en caprichos ostentosos, como una isla privada en Virginia que la ex Spice Girl regaló a su expareja como regalo de cumpleaños.

La letrada de la jueza de America’s Got Talent señaló que durante los diez años de relación la pareja nunca tuvo dinero para hacer frente a los impuestos a final de año y que todo lo ganado por la señora Brown en el popular grupo británico fue aportado al matrimonio.

Sin embargo, todo ese dinero se invirtió en caprichos prohibitivos, como el millón en coches de lujo -un Bentley Continental GTC, un Ferrari California, un Cadillac Escalade ESV, un Range Rover blindado y un Mercedes Benz S-Class, entre muchas cosas