Mineros atrapados en Sabinas, Coahuila: la tensión aumenta a 18 días del derrumbe

El mayor enemigo durante el rescate de los mineros atrapados en la mina El Pinabete, en Sabinas, Coahuila, sigue siendo el agua. Pese a que se ha logrado reducir drásticamente la cantidad del líquido que se concentraba en la zona, no ha habido una confirmación de visibilidad de alguno de los trabajadores.

Este domingo se cumplen 18 días de que la filtración del agua ocasionara un derrumbe que dejó atrapados a 10 empleados que realizaban la extracción de carbón en el pozo ubicado en Villa Agujita.

Desde el miércoles 3 de agosto, las autoridades han buscado diversas maneras de atender la emergencia, mientras los familiares exigen que se rescate con vida a las víctimas.

La desesperación ha llegado al punto de que varias personas que trabajaron en este punto han solicitado que los dejen entrar para usar sus conocimientos en la mina y así poder llegar hasta sus compañeros. Se ofrecieron incluso a firmar una carta responsiva para que el gobierno no tenga consecuencias de su entrada al sitio. Esta petición ha sido negada por cuestiones de seguridad.

¿En qué va el rescate?
La estrategia de las autoridades se centra actualmente en evitar la filtración de agua desde los pozos que se encuentran cerca de este punto y ocasionan que no pueda extraerse completamente el líquido,

Para esto, la empresa alemana DMT y la norteamericana Phoenix First Response se reunieron con el Gobierno de México para analizar la mejor estrategia para rescatar a los mineros.

Mientras ocurre esto, el equipo encargado de esta acción ha continuado con la extracción del líquido. Se prevé que eventualmente se localice el agujero desde el que el agua pasa al pozo y sea bloqueado con un muro.

De esta manera, los especialistas podrán continuar con el apuntalamiento de la zona para evitar los derrumbes y posteriormente localizar a los trabajadores.

La expectativa de vida en esas condiciones se complica, ya que no han recibido alimentos, líquidos que pueda nutrir sus cuerpos. A esto se debe sumar las condiciones climáticas, la humedad que hay en el lugar.

La última vez que los expertos trataron de entrar al lugar, se vieron imposibilitados a hacerlo, ya que una nueva inundación entorpeció las labores. Sin saber dónde se encuentra la filtración será imposible para los rescatistas buscar a los atrapados, ya que es necesario que puedan maniobrar dentro de él.