Radiografía de la inflación más alta en 21 años: todavía viene lo peor

El dato de 8.62 por ciento en cuanto al nivel de la inflación, informado por el Inegi, es la cifra más alta que ha registrado el país en 21 años sobre el indicador. Esto significa para los bolsillos de los mexicanos un gasto extra de 0.72 por ciento más a la hora de comprar algunas mercancías y del 0.22 por ciento en el momento de contratar un servicio.

La directora del Instituto Mexicano para la Competitividad, Valeria Moy, estima que los que más resentirán este cambio no serán las empresas, sino la gente que menos recursos tienen, ya que son las que destinan una mayor parte de sus ingresos en el pago de alimentos.

Los aumentos generalizados se encuentran en bienes como los relacionados con el sector agropecuario, las bebidas, los alimentos y el tabaco.

¿Cuándo podría haber una recuperación?

Jessica Roldán, economista en jefe de la Casa de Bolsa de Finamex, agrega a lo dicho por Moy al asegurar que el dato quincenal  dado a conocer la mañana de este miércoles está por encima de lo que se tenía previsto. Además alertó que los precios de los productos continuará elevándose de manera sistemática a corto plazo.

Indicó que los electrodomésticos, elementos de cuidado para la salud, así como diversos servicios dan a entender que el bolsillo de los mexicanos seguirá siendo golpeado. El tiempo en el que la balanza cambiará es incierto, aunque apuntó que en la segunda quincena de septiembre se prevé la llegada del pico máximo en cuanto a los costos.

Posterior a esto, hay una posibilidad de que las finanzas de las familias mexicanas comiencen una recuperación pausada. Otro riesgo que dio a conocer es el comportamiento de las tasas de interés en Estados Unidos, cuya economía suele afectar a la mexicana.

De acuerdo con distintos analistas, explicó, se prevé que esta cifra siga aumentando para controlar la estructura económica interna. Como consecuencia, los créditos incrementarán sus costos.

Ricardo Aguilar Abe, economista en jefe de Invex, refirió en entrevista con El Heraldo de México, que no se descarta que la inflación general anual se acelere a cerca de nueve por ciento en septiembre, para después descender a 8.50 por ciento.

Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda y Crédito Público, aseguró en septiembre que el cambio en este indicador se debe a la escasez de productos y de mano de obra a nivel mundial, por lo que es necesario mantener la política económica implementada por el gobierno.

¿Está funcionando el plan de AMLO?

El Gobierno de México ha establecido un control de precios en el que se han invertido 574 mil millones de pesos para evitar que las familias deban pagar más por 24 productos clave para la canasta básica y el cual lleva por nombre Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic).

Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda y Crédito Público, defendió este plan en septiembre al asegurar que el Gobierno federal busca implementar un programa que permite contener los embates que sufre la economía por la crisis mundial por la variación en la oferta, demanda y escasez de distintos insumos.

Destacó que la estrategia debe estar ligada a un control de la tasa de interés. Además de esto, previó que Hacienda y el Banco Interamericano de desarrollo (BID) creen incentivos para que las empresas se enfrenten a un mejor panorama.

Valeria Moy aseguró que el plan contra la inflación es un paquete de buenas intenciones que no define nada en concreto, debido a que incluye medidas deseables como el proteger la cadena de suministro por medio del aumento en la vigilancia en las carreteras.

Destacó que lo que en verdad está ayudando a controlar la inflación el subsidio que se está brindando a la gasolina, el cual estimó en 12 mil millones de pesos a la semana. Sin esta regulación, aseguró la economista, la inflación estaría por encima del 11 por ciento.

«Es una medida costosísima», dijo.

La equivalencia de mantener los costos en los hidrocarburos de manera semanal, apuntó, cuesta lo mismo que mantener el extinto programa de Escuelas de Tiempo Completo durante todo un año.

«Es un subsidio costosísimo para las finanzas públicas y me queda claro que esta es una decisión mucho más política que económica», dijo.

La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) ve en este plan un esfuerzo insuficiente, debido a que aunque hay varias medidas para evitar los incrementos, no hay un verdadero alivio a la situación en el mercado.

Esto no evita las variaciones en otros sectores. Como ejemplo se puede hablar de los útiles escolares, los cuales fueron hasta un 20 por ciento más costosos para los padres durante el regreso a clases, según información de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur).

Otro de los sectores que muestra la alza generalizada en el costo de vida es el inmobiliario, ya que de acuerdo con la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF) se ha encarecido el obtener una vivienda en un 7.09 por ciento. Las zonas más afectadas en cuanto al precio de los créditos en el sector son Quintana Roo, Baja California, Nayarit, Michoacán y Sinaloa.

No todas son malas noticias, pues pese a la inflación hay servicios como el de telecomunicaciones que han disminuido sus costos, así lo informó el IFT.

¿Por qué ya no alcanza?

De acuerdo con la el maestro Héctor Iván del Toro Ríos, profesor investigador del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA) de la UdeG, adquirir los productos de los 123 productos dentro de la canasta básica, no solamente los 24 protegidos por el Pacic, tiene un costo de 11 mil 529 pesos.

Si a esto se le agrega el pago de productos o servicios, el especialista apunta a que es necesario tener al menos 22 mil 182 pesos para poder solventar de forma holgada las necesidades de una familia mexicana. En caso de que alguno de los integrantes tenga una enfermedad crónica, esta cifra podría aumentar inclusive a los 22 mil182 pesos.

Estos datos contrastan con el salario mínimo, el cual se encuentra en cinco mil 258 pesos, menos de la mitad de lo que se necesita para comprar todos los alimentos de la canasta básica.

Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), aseguró en entrevista con Sergio Sarmiento y Lupita Juárez que los precios de loa alimentos ha sido de más del 15 por ciento, lo cual ha presionado a los padres que habitan la República Mexicana.

Destacó que la información que brindan las autoridades no reflejan la realidad y estima que el indicador llegue hasta el 10 por ciento, lo cual acabará por absorber la totalidad de los salarios de la ciudadanía.

Entre el 12 y el 19 de agosto la mayor parte de los precios de la canasta han mantenido su precio en la región del centro del país, donde se encuentra ubicada la Ciudad de México, mientras que los que incrementaron sus costos tuvieron un cambio marginal, así lo dio a conocer un estudio realizado por el Grupo Consultor de Grupos Agrícolas.

En el caso de la región Bajío que comprende a zonas como Aguascalientes, Jalisco, Guanajuato, Querétaro, San Luis Potosí, Michoacán y Zacatecas, algunos alimentos tuvieron una alza de hasta seis pesos, aunque la mayor parte de estos, no hubo una variación significativa.

 

En el caso del norte del país la situación fue similar, ya que el máximo incremento se dio un productos como la cebolla, la cual elevó su costo en seis pesos. Esta zona comprende puntos como Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Coahuila, Durango, Nuevo León, Sinaloa, Sonora y Tamaulipas.

De acuerdo con datos del Inegi. Los alimentos más afectados durante ese periodo fueron los siguientes.

  • Cebolla, con 37.66 por ciento.
  • Limón, con 6.90 por ciento.
  • Uva, con 4.24 por ciento.
  • Naranja, con 4.23 por ciento.
  • Sandía con 4.16 por ciento.
  • Papaya, con 3.18 por ciento.
  • Papa y otros tubérculos, con 2.36 por ciento.